domingo, 12 de octubre de 2014

MEDITAR CON LUZ: VER LA LUZ









Rezar a la luz del fuego es una práctica sumamente antigua, que se remonta a los albores de la civilización. El fuego, que es uno de los elementos más poderosos, puede limpiar una determinada área, pero al mismo tiempo destruirla. Calienta, pero también quema. El fuego es algo que no hay que tomar a la ligera. Hay que entenderlo de una manera adecuada. La meditación con velas es una herramienta muy poderosa, que utiliza el poder del fuego. Se emplea para visualizaciones y para calmar el ser interior. De hecho la llama representa el ser interior.

¿Ha notado que a veces nos sentimos solos aunque estemos rodeados de gente? La razón de este sentimiento es simple y, sin embargo, puede tener un serio efecto sobre nuestro bienestar. Hemos perdido el contacto con la Tierra y con nuestra conexión a sus vibraciones, con las que los seres humanos habían estado en contacto desde que empezaron a poblar el planeta. Una manera sorprendente de volver a captar esta energía es por medio de la meditación con velas. No importa el ángulo desde el que lo contemple, hay algo primigenio en el fuego. Incluso una simple llama tiene el poder de ocasionar un daño irreparable si no se respeta y controla. Hay que vigilar incluso la llama de la vela más pequeña. Hasta ésta puede hacer que una casa arda completamente. Jamás hay que subestimar el poder de una llama, ni siquiera la de una vela.

Las velas se emplean en todo tipo de ceremonias y también para la magia y los hechizos. Pero asimismo se usan como una poderosa herramienta de meditación. Lo asombroso de la meditación con velas es que usted no tiene que sentarse frente a la vela y hacer una meditación completa para recibir sus efectos beneficiosos. Las velas pueden encenderse y mantenerse a la vista mientras está preparando la comida, viendo la televisión o leyendo. Tener una vela encendida no sólo ayuda a tener presente la meditación, también constituye una representación del elemento fuego. Las velas pueden ser al mismo tiempo reforzantes y curativas. Hay algo remoto y romántico en el acto de encender una vela. Evoca un sentimiento de misterio.


El color de una vela representa un importante papel para alcanzar el resultado deseado, al igual que su olor. Encender una vela con olor a jazmines o rosas facilita la meditación. Y su aroma es maravilloso.




Fuente: Internet

lunes, 6 de octubre de 2014

Formas de la percepción extrasensorial









La forma más conocida de la percepción extrasensorial es la clarividencia, que es la habilidad para ver el mundo espiritual. La clarividencia incluye ver imágenes con la vista o en la mente.

Otro sentido que puede involucrarse en la percepción extrasensorial es el oído. Algunas personas escuchan los mensajes de los ángeles por medio de su sentido del oído, o como una voz clara que se manifiesta en su mente. A veces el olfato también puede dar indicios del mundo espiritual, como cuando se percibe un olor que no tiene origen claro. Por medio del tacto la persona con habilidades psíquicas muchas veces puede percibir sensaciones de frío o calor que no tienen explicación lógica en el ambiente inmediato.

Otra manera en que los ángeles comunican sus mensajes es por medio de los pensamientos mismos. Algunos seres humanos, en vez de ver visiones o tener sensaciones extrañas, reciben los mensajes directo a sus pensamientos. Este es el caso cuando una persona sabe lo que otra va a decir, o cuando alguien puede explicar, sin saber cómo, la información que nunca ha recibido o estudiado. Este tipo de percepción también se manifiesta por medio de descubrimientos de textos que dan respuesta a preguntas previamente formuladas. En otros casos más complejos, textos enteros han sido dictados a una persona por un ser del mundo espiritual con enseñanzas para el ser humano o correcciones de las enseñanzas previas. Este es el caso de Un curso de milagros, dictado a Helen Schucman, psicóloga y profesora de la Universidad de Columbia, quien escuchó "interiormente una voz" que le dictó el material durante un período de siete años.



Sin embargo, no son los sentidos los que muchas veces perciben a los ángeles u otras personas o eventos del mundo espiritual, sino los sentimientos. Con frecuencia, personas que no se identifican como psíquicas y ni siquiera espirituales tienen sentimientos que los alertan de peligro para sí mismos o para sus seres queridos. La sensación de que "algo va a pasar" muchas veces demuestra ser una advertencia concreta.


Fuente: Internet.


domingo, 5 de octubre de 2014

La percepción extrasensorial y la comunicación con los ángeles









El ser humano confía en sus cinco sentidos para entender y conocer el mundo que lo rodea. Sin embargo, estos cinco sentidos humanos se limitan al mundo material y no se relacionan con el mundo del espíritu a menos que la persona cultive algo que ha llegado a llamarse el sexto sentido: la percepción extrasensorial.

Como la mayoría de los conceptos espirituales, la percepción extrasensorial se basa en la intuición y la fe. No se puede medir o explicar, y no tiene lógica. Se cree en ella o no. La mente lógica, junto con el ego humano, niega su existencia.

Por eso, la percepción extrasensorial solo se puede cultivar mediante la fe. Requiere aceptar como reales las cosas que normalmente se denominan imaginarias. La guía y conexión con Dios que los ángeles ofrecen al ser humano, son captadas por el alma humana, pero rechazadas por la mente lógica.

Los ángeles, como seres creadores de enlaces entre el mundo material y el espiritual, utilizan la intuición humana y la percepción extrasensorial (que muchas veces se pueden considerar la misma cosa) para comunicarse.


Parte del trabajo de sanación y comunicación con los ángeles es lograr que la mente lógica venza al ego humano y permita que los sentidos humanos puedan captar los mensajes de los ángeles y utilizarlos conscientemente. Para trabajar con los ángeles es necesario aprender cómo se manifiestan los mensajes a través de la percepción extrasensorial.



Fuente: Tania